lunes, 1 de diciembre de 2014

Tres Cantos respira... ¿veneno?



Tres Cantos, son las 10 de la mañana. Avenida de Viñuelas. Recién superado por mi parte el resfriado vírico que la mayoría hemos sufrido, sufrís o sufriréis. Quiero decir que, ahora mismo respiro bastante bien.

De repente siento un olor extraño. Miro a mi alrededor y veo a un hombre con un mono blanco con capucha, con gafas de protección, con mascarilla de protección. Una mochila a la espalda y una lanzadera con la que pulveriza algo en el hueco de los árboles. Este es el líquido que huele "diferente". Yo no llevo mono protector, mis gafas son de miopía y tampoco protejo la entrada de aire a mis pulmones con mascarilla. Tan sólo llevo en la mano la bolsa de rafia del supermercado al que me dirijo.

 Siendo hoy 1 de diciembre están echando productos fitosanitarios en el hueco de los árboles, concretamente herbicidas para impedir que crezca grama local. Ellos son más de césped inglés, ya se sabe.

Estoy a la puerta de un supermercado son las 10 de la mañana y están echando veneno en nuestras calles para ¿limpiarlas? Alguien puede preguntar si de verdad es veneno lo que echan en nuestras calles. La solución a la duda se resuelve siguiendo este enlace o éste otro. Para saber más, sobre este producto, inicialmente introducido por Monsanto, nada mejor que acudir a la Wikipedia.

¿Cuál es la razón por la que sé de que producto se trata? Porque nuestra asociación ecologista local ARBA, lleva persiguiendo el asunto hace tiempo.  La ultima vez que los vi usando el veneno, fue más alarmante, frente al Colegio Carmen Iglesias, justo a la hora de entrada de los críos ¡¡!!

Es evidente que no me voy a morir por haber olido ese producto, pero también es de cajón que podían habérmelo evitado. Primero porque no son horas. Segundo porque no es normal usar ese producto a la puerta del supermercado abierto. Tercero, porque el 1 de diciembre la hierba ya no va a crecer, o lo va a hacer muy despacio. ¿Estamos locos o simplemente hay un compromiso de gasto del producto?

No todo es política también está el sentido común.